Pablo Trueba (Simape) se mostró preocupado por el manejo del langostino y aclaró que los gremios marítimos no participaron del bloqueo del puerto.
El secretario general del Sindicato Marítimo de Pescadores (Simape), Pablo Trueba, aseguró que no son más de 40 las embarcaciones que se irán al sur a pescar langostino, se mostró preocupado ante la posibilidad de que Mar del Plata resulte perjudicada en el plan de manejo de la especie y aclaró que los gremios marítimos no participaron del bloqueo del puerto.
Ante las versiones que hablaban de una gran cantidad de barcos que se irían a la zafra de langostino (el gremio de los estibadores –SUPA– señaló que serían “entre 60 y 70”, mientras que cooperativistas hablaron de “más de cien”), Trueba mencionó: “No son ciento y pico de barcos, son 40, como fueron toda la vida”, indicó.
Incluso se mostró preocupado ante la posibilidad de que resoluciones del Consejo Federal Pesquero “limiten” el accionar de esas embarcaciones. “Con el langostino pueden hacer una diferencia en el año. Imposibilitarlos de hacer eso es directamente cercenar a los trabajadores de arriba de los barcos”, indicó.
Según el dirigente, el plan de manejo de langostino que podría ponerse en marcha “no sólo limitaría a los barcos fresqueros de Mar del Plata, sino que a su vez cerrarían los golfos de pesca, Santa Cruz y Chubut, pero les darían cuota social a las plantas en tierra de esas provincias. Se habla de 8.000 toneladas de pescado. Esas plantas van a contratar barcos sin permiso de pesca”, alertó.
Trueba recordó que las cámaras empresarias y los gremios marítimos pidieron la intervención de la gobernadora María Eugenia Vidal “para que se frene este manejo que se quiere llevar a cabo y hacer durante este año un manejo del langostino sustentable para todos”.
El objetivo es que Vidal pueda influir en la decisión del Consejo Federal. “Pedimos la intervención directa de la gobernadora porque, por más que la provincia de Buenos Aires se oponga a esta política, perdemos 9 a 1”, aventuró en relación con los votos del resto de las provincias y de los representantes del Poder Ejecutivo en el Consejo.
El bloqueo del puerto, encabezado por el Sindicato de Choferes de Camiones, obedeció a las dificultades laborales que podrían generar para los trabajadores en tierra (transportistas, fleteros, estibadores, fileteros) los barcos que se van al sur.
Aunque reconoció los inconvenientes, Trueba aclaró que el Simape, el Siconara (conductores navales) y el Centro de Patrones Pescadores no participaron de la medida de fuerza.
Indicó que la solución debería pasar por “comprometer a los barcos” a traer en camiones a Mar del Plata lo pescado en el sur para procesarlo. Pero aclaró que la descarga deben hacerla en los puertos patagónicos, que están frente al sector de pesca del langostino, porque de lo contrario tendrían que navegar “50 o 60 horas”.